Laura Sofia Serrate

¿Qué significa que un queque se “desmigue”?

A todas nos ha pasado: sacamos un queque hermoso del horno, lo cortamos y… ¡se hace migas!

No es que esté malo, pero la rebanada no queda compacta, se rompe fácil y parece que el queque no se "amarró".

¿Qué pasa técnicamente?

La miga de un queque se sostiene gracias a una red muy delicada formada por:

  • Gluten de la harina (elasticidad y estructura).
  • Proteínas del huevo (cohesión y estabilidad).
  • Grasas y azúcares (suavidad y humedad).

El polvo de hornear crea burbujas de aire y esa red es la que debe atraparlas.

Si la red está débil o desequilibrada, el queque puede subir bien, pero al cortar no se mantiene en tajadas firmes: se desmiga.

En palabras simples: subió, pero no se amarró.
Queques

Principales causas

• Exceso de polvo de hornear

Subida explosiva, burbujas grandes → la estructura colapsa en migas.

Ajuste: reducir un 10–15%, no solo 1 g.

• Mucho azúcar

El azúcar ablanda el gluten: la miga queda tierna pero frágil.

• Ingredientes que alteran la humedad

  • Cacao: reseca la masa si no se hidrata antes.
  • Zanahoria rallada muy fina: suelta agua → húmedo pero flojo.

• Falta de emulsión

Si huevos, grasas y líquidos no se integran bien, la estructura se rompe. Una yema extra o un poquito de miel ayudan.

• Harina floja o con poca proteína

Menos gluten = miga delicada pero poco resistente. A veces conviene mezclar: 80% harina común + 20% harina de fuerza.

• Horneado y reposo

  • De más: pierde humedad → se parte.
  • Cortar en caliente o enfriar mal: reseca la miga.
Errores en queques

Casos del Chat de Hor(a)migas

Chat camila

Carrot Cake (Camila)

Muy húmedo y esponjoso, pero poco compacto porque la zanahoria fina libera agua y el azúcar rubia suaviza demasiado el gluten.

Ajustes: bajar un poco polvo de hornear y azúcar, rallar la zanahoria más gruesa, exprimir si suelta jugo, y probar con 1 yema extra.

Queque de chocolate (Claribel)

El cacao absorbe agua y reseca, por eso queda más quebradizo.

Ajustes: hidratar el cacao con líquido caliente antes de usar ("bloom"), reducir polvo de hornear 10–15%, y cuidar la cocción (95–98 °C al centro). Una yema extra o un chorrito de miel ayudan a darle unión.

En resumen

Cuando un queque se desmiga, el problema no es de sabor sino de estructura. Ajustando leudantes, azúcar, humedad de ingredientes y reforzando la emulsión, podés lograr rebanadas húmedas y compactas que se corten perfectas.

©2025 Laura Sofía Serrate. Todos los derechos reservados.